El estadio Maracaná de Río de Janeiro, que aún precisa de retoques antes de ser sede del Mundial del 2014, se inauguró hoy con una lluvia de goles en un partido entre “amigos” de Ronaldo y Bebeto, que acabó 8-5 para el equipo del primero.

Ronaldo marcó dos goles, uno después de un brillante regate marca de la casa, Bebeto convirtió un penalti al final del partido y quedó con un balance peor que su propio hijo, Mattheus, que hizo dos tantos.

La inauguración oficial del Maracaná, con el aforo completo de 78.000 localidades, se cumplirá el 2 de junio con el amistoso Brasil-Inglaterra.

El estadio está prácticamente terminado. En la parte interna falta instalar las sillas y pupitres de la tribuna de prensa y en la externa, concluir la

urbanización del entorno.