El lanzamiento de bengalas al césped del estadio Geoffroy Guichard de Saint Etienne interrumpió durante unos minutos el partido entre la , del Grupo D de la .

Varias bengalas cayeron en una esquina del campo, en el córner izquierdo de la portería de la República Checa, en el tramo final. El partido se detuvo durante seis minutos.

Una vez solventada la situación, el árbitro inglés Mark Clattenburg, reanudó el encuentro con 1-2 en el marcador para el conjunto balcánico.

En el tiempo añadido llegó el penal que favoreció a los checos y que significó el empate final 2-2. Croacia estuvo ganando por 2-0 hasta el último cuarto de hora.