¿Fue necesario? Sergio Ramos se ganó las pifias de los asistentes al Santiago Bernabéu, quienes se indignaron con la acción del capitán tras poner la mano en el área. Dicho acto provocó un penal que convirtió Bruno Soriano para el 1-0 del Real Madrid vs Villarreal y silenciar el Bernabéu.