El regresó a los entrenamientos horas después de la derrota en el clásico, aún con el mal sabor de boca tras el triunfo del en el Santiago Bernabéu y dejar escapar la posibilidad de dar un golpe decisivo en la lucha por el título liguero, y se centró en el duelo de Riazor.

Allí perdió el Barcelona y sirve de aviso para el encuentro en el que está obligado a reaccionar el Real Madrid de Zinedine Zidane tras encajar su tercera derrota del curso liguero. Lo comenzó a preparar tras una noche de pocas horas de sueño para los jugadores madridistas, que ya intentan olvidar lo sucedido en el clásico y mirar hacia adelante.

Fue una sesión de recuperación para los titulares, sin el galés Gareth Bale que se someterá a pruebas por un nuevo percance muscular. Junto a él se quedaron en el interior de las instalaciones de la ciudad deportiva, Sergio Ramos, que será baja ante el Deportivo de la Coruña por su expulsión, más Dani Carvajal, Nacho Fernández, Toni Kroos y Karim Benzema.

Estiraron piernas sobre el césped y siguieron con trabajo suave en el gimnasio Keylor Navas, Marcelo, Casemiro, Luka Modric, Marco Asensio y Cristiano Ronaldo, según informa la web. El resto del primer equipo del Real Madrid trabajó con mayor intensidad reforzados por los jugadores del Castilla Alex Salto, Achraf Hakimi, Federico Valverde y Enzo Zidane.