“Hasta los mejores fallan”, dicen las malas lenguas. Y lo pudo comprobar en el partido del frente al Manchester City por los octavos de final de la . El delantero erró un penal que pudo cambiar la historia del conjunto francés.

A los 48 minutos, una falta de Nicolás Otamendi fue vista por el árbitro, quien no dudó en cobrar la pena máxima. El encargado de ejecutar fue Radamel Falcao; sin embargo, la fortuna no estuvo de su lado y el portero Willy Caballero logró contener el disparo.

Los hinchas del Mónaco no lo podían creer, su goleador les había fallado en el momento cumbre del partido. El ‘Tigre’ espera cobrarse la revancha en la vuelta de los octavos de final de la Champions League.

El fallo de Radamel Falcao con el Mónaco en la Champions League