Liverpool se coloca segundo en la tabla, a cuatro puntos de los de Arsene Wenger, mientras que el Chelsea pierde una posición y es tercero, con los mismos puntos pero peor diferencia de goles, y el Manchester City es cuarto, con un punto menos.

En Anfield se vivió un partido en el que hubo más goles en propia puerta (tres) que en la portería correcta (dos). El marfileño Guy Demel y el irlandés Joey O’Brien batieron a su propio portero y dieron así dos goles al Liverpool, que completó el marcador por medio del francés Mamadou Sakho y Luis Suárez.

El eslovaco Martin Skrtel, por su parte, envió un balón a la red de Mignolet que significó el gol del honor para West Ham United.