“Me quedaría fuera. Pondría uno a cada lado y me quedaría mirando para aprender”, dijo Ronaldinho en el Foro México Siglo XXI, un ciclo de conferencias en el que también participaron Hillary Clinton, Antonio Banderas, Mark Zuckerberg y Lizzie Velázquez.

Mientras el presidente del Querétaro, Olegario Vázquez Aldir, anunciaba en Twitter que había fichado a Ronaldinho, el brasileño aseguraba sentirse nervioso mientras contestaba preguntas ante las 10.000 personas asistentes al foro.

En el Auditorio Nacional de la Ciudad de México, vestido de ropa informal, Ronaldinho se negó a elegir a un mejor futbolista entre Pelé y Diego Armando Maradona y se le ocurrió la propuesta de salir de la cancha para que ellos dos pudieran jugar.

Aunque reconoció ser buen bailador y cantante, dijo que su verdadera fiesta era en la cancha y con un balón. “Dentro del campo, ahí está la mejor fiesta para mí”, apuntó.

Ronaldinho, de 34 años, habló de su fundación para ayudar a niños pobres en su país y dijo que ha sido una de las mayores satisfacciones de su vida porque el fútbol le dio dinero y le dio la posibilidad de ayudar a hijos de amigos suyos.

Sobre los elogios que ha recibido de Lionel Messi, matizó que se deben a que es su amigo.

“Él sabía todo lo que hay que saber desde chiquito, yo solo fui solidario con él para que tuviera un buen ambiente cuando llegó al equipo”, explicó.

Ronaldinho Gaucho reveló que su decisión de jugar al fútbol ocurrió cuando Brasil ganó el Mundial Estados Unidos 1994 y al referirse a su primer llamado a la Selección Brasileña, bromeó al decir que un día jugaba juegos de computadora con los ídolos de su país y al siguiente se entrenaba con ellos en la selección.

“Estaban Ronaldo, Rivaldo. Siempre me trataron bien y eso hizo todo más fácil”, puntualizó.