El delantero italiano del Milán Mario Balotelli fue sancionado este lunes con tres partidos sin jugar por haber proferido insultos y amenazas al árbitro del encuentro que su equipo disputó este domingo contra el Nápoles y que terminó con victoria de los napolitanos por 2-1.

El juez deportivo Gianpaolo Tosel dispuso este lunes la sanción contra el futbolista tras la doble amonestación que recibió en el partido por “comportamiento incorrecto” hacia un jugador rival y por “protestas” a los árbitros, según explica la Liga de fútbol italiana en un comunicado.

Al partido de sanción por la doble amonestación se suman otros dos por, en el momento de la expulsión, haber proferido al árbitro “expresiones injuriosas e intimidatorias”.

Balotelli fue expulsado al final del partido de la cuarta jornada de la Primera División (Serie A) de la Liga italiana que el Milán disputó en el Estadio Giuseppe Meazza (San Siro) contra el Nápoles que entrena el español Rafa Benítez.

El jugador fue expulsado por reiteradas protestas hacia el árbitro del encuentro tras dirigirse al término del partido al centro del terreno de juego con evidentes muestras de enfado, que fueron a más al ver la tarjeta roja, lo que motivó que algunos compañeros le tuvieran que sujetar.

Balotelli, autor del único tanto del Milán, ya había sido amonestado en el minuto 58 del partido con tarjeta amarilla por una falta cometida sobre un rival.

Tosel dispuso además un partido sin espectadores en la zona de la grada de San Siro en la que se sitúan los aficionados ultras del Milán por haber dirigido a los hinchas del Nápoles cánticos a modo de insulto por el origen sureño de los mismos.