Liverpool fue superior a Manchester City y bien pudo llevarse la victoria, cosa que anhelaban Manchester United y Tottenham, pero al final solo arrancó un empate, pues empezaron perdiendo.

Kompany abrió la cuenta a los 31 minutos del primer tiempo, pero el defensa del City, Lescott, dos minutos después, anotó el empate en propia puerta. A siete del final, expulsaron al italiano Balotelli por doble amarilla.

El Liverpool tomó la iniciativa y no la soltó. Puso en apuros al Manchester City, desprovisto del dominio. Solo a la contra, esporádicamente, puso en aprietos el área de Pepe Reina, que solventó con certeza cada contratiempo.

City gobierna la Liga Premier con 35 puntos, atrás está el United con 30 y Tottenham con 28.