Era el año de 1997 cuando ‘Mou’, asistente técnico en el club blaugrana, no tenía reparos en mostrar su cariño e incluso hinchaje a la institución del Camp Nou.

En una de las tantas celebraciones que tuvo el Barcelona por los título que conseguía, José Mourinho se dirigió a los hinchas y manifestó “Hoy, mañana y siempre con el Barcelona en el corazón”.

Años después, el portugués se convertiría en visita no grata en el Camp Nou y de los personajes más resistidos por los hinchas culés.