La Inglaterra que dirige el italiano Fabio Capello salió airosa del duelo contra España, campeona de Europa y del Mundo (1-0), que fue incapaz de descifrar el fuerte sistema defensivo de los locales.

Wembley, el modelo de estadio del fútbol moderno. Con la magia del antiguo en una atmósfera única. En la cuna del fútbol. Donde un minuto de silencio pone los pelos de punta por el respeto al unísono de 87.000 aficionados. Donde los futbolistas son héroes que luchan hasta la extenuación. En el escenario que nunca olvidan los protagonistas que pisan el césped, España realizó un ejercicio de personalidad que acabó como castigo a instantes de relajación.

Frank Lampard, jugador del Chelsea, anotó el único gol del partido, tras un tiro libre, un golpe de cabeza al palo y otro golpe de cabeza, sobre la línea, que dejó sin opciones a Reina.

España, a pesar de su reacción que generó claras ocasiones para el empate, no marcó y aprendió una lección. Nunca debe relajarse, ni afrontar con una motivación diferente un amistoso que un oficial.

Ficha técnica:

1 – Inglaterra: Hart, Glen Johnson, Jagielka, Jones (Rodwell, m.57), Cole, Parker Walker, m.85), Lescott, Milner (Adam Johnson, m.76), Walcott, Lampard (Barry, m.57) y Bent (Welbeck, m.64).

0 – España: Casillas (Reina, m.46), Arbeloa, Sergio Ramos (Puyol, m.74), Piqué, Jordi Alba, Busquets (Fernando Torres, m.64), Xabi Alonso, Xavi (Cesc, m.46), Iniesta (Cazorla, m.74), Silva (Mata, m.46) y Villa.

Goles: 1-0, m.49: Lampard.

Árbitro: Frank De Bleeckere (BEL). Amonestó a Sergio Ramos (59) y Cesc (61) por España, y a Milner (41) por Inglaterra.

Incidencias: Encuentro amistoso disputado en Wembley, ante 87.189 espectadores. Inglaterra y España lucieron brazaletes negros y guardaron un minuto de silencio por el “Día del Recuerdo”, en honor de todos los soldados británicos fallecidos desde la Primera Guerra Mundial.