A pesar de la derrota, los otros resultados tampoco estuvieron del lado de Independiente , toda hacía indicar que su destino estaba que después de 108 años de vida institucional, se fueran de la primera división argentina por primera vez en toda su historia.

El único gol de partido llegó a los 14 minutos de la segunda fracción, Ángel Correa fue el jugador que mandó prácticamente al Independiente a su peor infierno en el fútbol, asustado por un fantasma de la ‘B’ que se lo llevó sin pena ni gloria.

El llanto, el dolor y sufrimiento era único en las graderías del estadio de Avellaneda. Pero así suele suceder, le pasó a River Plate y ahora le tocó a Independiente, los grandes también se caen.