“Todos me llamaron para darme consejos y desearme suerte, lo agradecí mucho, la verdad”, dijo Bale.

“Entrené un tiempo con David Beckham en el Tottenham, así que le conozco bien. Hablamos del Real Madrid. También con Jonathan Woodgate y Steve McManaman, cuando le conocí haciendo una entrevista”.

“Ellos pasaron por la situación que yo estoy viviendo antes y todos me ofrecieron buenos consejos de los que tomé nota y que me están ayudando mucho ahora en el Real Madrid”, añadió Bale.

Otro de los asuntos sobre los que trató fue la cantidad de su traspaso.

“Nunca he pensado en eso, sólo me centro en jugar al fútbol. Lo que el Real Madrid pagó por mi no es asunto mío. Sólo quiero ser el mejor jugador que puedo ser. No hay rivalidad con Cristiano Ronaldo ni por eso ni por nada, al contrario, nos llevamos muy bien y desde el primer día se ha portado de forma increíble conmigo, ayudándome fuera y dentro del campo”, resaltó.

“Cristiano siempre me dado confianza y ánimo y me está ayudando mucho. Es un verdadero placer cuando jugamos juntos y creo que se está reflejando en forma de goles y asistencias, pero lo mejor es que estamos empezando y que vendrán muchos más”, añadió Bale.

Respecto al Balón de Oro, Bale se decantó claramente por su compañero en el Real Madrid.

“Para mí, Cristiano es el mejor jugador del mundo y no creo que nadie esté cerca de él en este momento. Con Portugal, con toda la presión que tenía, demostró que es un jugador de clase mundial. Para mí, repito, es sin duda el mejor jugador del mundo y se merece ese premio”, resaltó.

“Desde que llegue al Real Madrid creo que ha anotado casi dos goles por partido. Es increíble. La cantidad de goles que marca es alucinante”, comentó Bale.

Respecto a su adaptación a la forma de vida en Madrid indicó que su español “está mejorando lentamente”. “Estoy recibiendo clases y es importante tratar de aprender el idioma y conocer la cultura. Siempre tuve el sueño de jugar en el Real Madrid y siempre quise jugar al fútbol en el extranjero, fuera de Gran Bretaña”, concluyó Gareth Bale.

EFE

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