El entrenador del club Ajaccio de Francia creía que su jugador, Tallo, estaba lesionado de gravedad, por eso decidió reemplazarlo.

No era para menos. Tallo salió del campo en camilla y hasta se tomaba el rostro de dolor, pero al salir del campo se recompuso de inmediato, pero era demasiado tarde. Otro jugador ya había entrado a reemplazarlo.

Su reacción fue violenta. No podía creerlo. Le recriminó duramente a su DT.