Los equipos aztecas suelen romper el mercado para reforzarse con grandes contrataciones y no solo hacen los equipos grandes como América o las Chivas, sino que el modesto Querétaro demostró su poder económico con el fichaje de Ronaldinho Gaucho.

Pero Dinho no es el mejor pagado de la liga mexicana, es más ni siquiera está en el podio que lidera el paraguayo Roque Santa Cruz, flamante jugador del equipo Cruz Azul de México.

El guaraní es escoltado por otro artillero: El goleador del América, Oribe Peralta, es el segundo futbolista mejor pagado en su país, en una clara demostración que hoy en día los goles valen literalmente una fortuna.

Es por ello, que desde hace algunas temporadas no es muy extraño que los equipos mexicanos arrebaten jugadores a grandes clubes de Sudamérica y es que los jugosos sueldos que ofrecen son un atractivo casi imposible de rechazar.