A Mario Mandzukic, Raúl García, Antoine Griezmann y Raúl Jiménez se suma Fernando Torres, de vuelta al club de su vida siete años y medio después, con la experiencia, los goles y los títulos en su maleta (la Champions League y la Europa League con el Chelsea y dos Eurocopas y un Mundial con España) y con la confianza de Diego Simeone.

Es un impulso más a esa “competencia interna” en la que insiste el entrenador cada temporada para hacer mejor al equipo y al grupo por la calidad de toda la plantilla, desde los titulares habituales hasta los recambios en el banquillo, y que el preparador considera indispensable para el crecimiento año tras año de su conjunto.

También es una alternativa más para el juego del equipo, porque Fernando Torres tiene más movilidad y contragolpe que Mandzukic, un jugador más fijo dentro del área, pero también capacitado para abrirse a banda, tocar perfectamente de primeras y dar continuidad a todos los balones aéreos que sobrevuelan su cabeza.

Mandzukic ha sido indiscutible esta temporada como referencia arriba. Incluso, Simeone ha apostado este curso por un cambio de estilo, con más volumen de juego y combinaciones hacia el área, además de constantes subidas de los laterales, para buscar la actividad cerca de la portería rival y para potenciar su remate.

Mandzukic ha respondido con goles. Después del primer proceso de adaptación del punta al juego del equipo y viceversa, ha alcanzado el primer tercio de la temporada con buenos números: 14 goles y una asistencia en 1728 minutos repartidos en 22 partidos oficiales.

Once de esos tantos han sido en los últimos quince choques del atacante, que sólo se ha perdido cuatro encuentros, dos por una fractura de nariz, otro por descanso, en la ida de la Copa del Rey contra L’Hospitalet, y uno más por sanción, en la última jornada del año contra el Athletic Club de Bilbao. El resto de duelos ha sido titular.

Unas veces le ha acompañado en punta Raúl García, la segunda de las opciones de ataque con más minutos en esta campaña. Ha disputado 22 encuentros, 16 desde la alineación inicial, con seis dianas, dos de ellas desde el punto de penal, y dos pases de gol al compañero.

En otras ocasiones, el elegido ha sido Antoine Griezmann, el segundo máximo goleador del Atlético de Madrid por detrás de Mandzukic en esta temporada, con nueve tantos, los tres más recientes en el 1-4 en San Mamés contra el Athletic Club de Bilbao, aunque con menos volumen de minutos (1229) que Raúl García y el ariete croata.

Las otras dos opciones manejadas para el ataque hasta ahora por Simeone han sido Raúl Jiménez, con un gol en 599 minutos repartidos en catorce duelos, cinco desde el once, y Alessio Cerci, que también ha jugado de extremo, pero sin apenas protagonismo, sólo con nueve partidos, uno de titular, y un gol.

Ya sin Cerci, que se marcha en este mercado de invierno al Milan, y a la espera de si hay más movimientos este mes de enero, Fernando Torres se añade a las posibilidades ofensivas del técnico para el segundo tramo de la temporada: tres delanteros naturales (él, Mandzukic y Raúl Jiménez) y dos más flexibles: Raúl García y Griezmann, por la posibilidad de que también jueguen por la banda.