Docenas de hinchas de Inglaterra y Rusia se agarraron a golpes y generaron destrozos en las calles de Marsella, donde el sábado estas selecciones se enfrentarán por el grupo B de la .

Los policías hicieron gran esfuerzo para detener a los desadaptados y eufóricos hinchas de estos países. Lanzaron gases lacrimógenos y detuvieron a algunos, quienes pasaron la noche entre rejas.