Un policía brasileño admitió este lunes haber disparado contra un joven de 16 años que murió tiroteado el domingo durante una pelea entre barras bravas rivales en el sur de Brasil.

El joven, identificado como Maicon Doglas de Lima, falleció después de recibir dos tiros, uno en la espalda y otro en las nalgas, durante una pelea entre hinchas rivales en la localidad de São Leopoldo, en el estado de Río Grande do Sul, después de un partido de fútbol entre el Novo Hamburgo y el Aimoré.

El agente autor de los disparos, cuya identidad no fue revelada, alegó haber respondido a una “agresión violenta”, según afirmó el teniente coronel Luiz Fernando Rodrigues, de la Brigada Militar (policía), en declaraciones a la radio Gaúcha.

Según el oficial, el agente implicado en el tiroteo ha sido apartado de sus funciones y está a disposición de los investigadores de la Brigada Militar y de la Policía Civil de Río Grande do Sul, que han abierto sendas investigaciones.

Según las investigaciones preliminares, los aficionados de ambos equipos se citaron por internet para la pelea en la estación de tren São Leopoldo, vecina al Estadio do Vale y que se ubica en el límite de los municipios de Novo Hamburgo y São Leopoldo.

El Novo Hamburgo lamentó la muerte de De Lima y, en un comunicado, afirmó que “siempre busca tomar las medidas de seguridad necesarias” para la protección de sus aficionados y que igualmente toma medidas “para promover la paz dentro y fuera del estadio”.

En el partido del domingo, un clásico regional que terminó con empate 2-2, las mascotas de ambos clubes entraron al césped con un letrero con la frase “¡Cada uno por su equipo y todos por la paz!”.

EFE