fue eliminado de manera polémica por el Real Madrid de la Champions League en el estadio Santiago Bernabéu con un global de 6-3 y lo que sucedió al final del encuentro llamó la atención.

Los jugadores suplentes del Bayern Múnich, una vez terminado el encuentro, corrieron con su celular en la mano hacia el 4to árbitro oficial para mostrarle todos los errores que cometió el árbitro principal, el húngaro Viktor Kassai, y que los perjudicó de manera directa en la eliminatoria de cuartos de final.

La no expulsión a Casemiro, la roja inmerecida al chileno Arturo Vidal y los dos últimos goles de Cristiano Ronaldo que fueron en evidente fuera de juego.

Thiago Alcántara y Ribery fueron los más entusiastas en el reclamo al cuarto oficial, aunque sabían que de poco valdrían. El resultado ya estaba dado y solo les quedaba aceptar.