continuó su racha ganadora en la Premier League este domingo tras doblegar por 3-1 al Arsenal en partido con dos polémicas claves a favor del equipo de Pep Guardiola.

Arsene Wenger, DT del Arsenal, puso el grito en el cielo al final del partido y sus declaraciones contra los árbitros e insinuar que el Manchester City tiene cierto favoritismo, podrían generarle una sanción.

“Las decisiones son malas y los árbitros no trabajan lo suficiente. Con estas decisiones arbitrales, el Manchester City es imparable”, dijo Wenger.

“Creo que no fue penal y todos sabemos que Sterling se tira muy bien. El tercer gol era fuera de juego, todos han visto lo que yo he visto. No quiero minusvalorar la calidad del Manchester City, pero esto ocurrió en un momento del partido en el que estábamos muy metidos”, agregó.