El cuadro bianconero sufría más de lo esperado ante su rival de turno, que sorpresivamente se había puesto arriba en el marcador. Y si bien el gol de Fernando Llorente daba cierta tranquilidad en Turín, no era suficiente para alegrar a los aficionados locales.

Pero tuvo que aparecer el genio de la volante de la Juventus, Andrea Pirlo, para poner a su equipo arriba en el marcador y no tuvo otra manera de hacerlo, que con su ya conocida sutileza para darle al balón.

El veterano jugador tomó el balón y sacó un perfecto remate de fuera del área que fue imposible de contener para el meta rival. Su anotación significó el 2 a 1 a favor de la escuadra juventina y la posibilidad de sumar una nueva victoria en la Serie A.

Juventus es el sólido líder del torneo italiano, siendo escoltado por la Roma.