El mexicano Moisés Muñoz sumó su nombre a una corta lista de guardametas goleadores en México, aunque el suyo quedará en los libros como el gol que alargó una final y allanó el camino del América a la conquista del título mexicano.

Muñoz escribió una página dorada al anotar de último momento el gol para que América empatara el global 2-2 ante el Cruz Azul, y llevara la final a tiempo extra y después a los penaltis, donde destacó al atajar un disparo.

Era la última jugada y el América estaba en desventaja de 1-2 en el global. Muñoz dejó a miles con la boca abierta al dejar su portería y sumarse al ataque, en una acción más desesperada que técnica y su atrevimiento causó una conmoción en el Azteca.

Un tiro de esquina, un remate de cabeza de Muñoz, el pie de un defensa que desvía el balón y el gol que empató 2-2 el global, forzó al tiempo extra y llevó a los penaltis la final del Clausura 2013.

En el desempate de los penaltis, obligados al terminar 2-2 la final jugada a dos vueltas, Muñoz atajó el primero al Cruz Azul, y el América tuvo el camino libre para el undécimo título de su historia en la liga mexicana.

La final mexicana ha marcado el mejor momento de Muñoz en un año difícil luego de que se pasó casi todo el torneo Apertura 2012 en recuperación de una lesión en la mano que tuvo al volcar su automóvil en una carretera.

En México se recuerda a guardametas como el mexicano Jorge Campos, portero-delantero, y Federico Vilar, experto ejecutor de tiros libres, como buenos goleadores, pero no había registro de goles agónicos en una final hasta que apareció Muñoz.