Según el titular de la DFB, Wolfgang Niersbach, Rusia no está en condiciones de albergar ni organizar un evento de la magnitud de una Copa del Mundo.

“Se observa con gran preocupación el desarrollo político en Rusia, algo que no era previsible cuando se tomó la decisión en diciembre de 2010”, manifestó el mandamás del balompié teutón.

Las declaraciones se Wolfgang Niersbach se sumaron a la de expertos en política, quienes reconocieron los problemas que vive el país ruso.

“No se le puede conceder el Mundial de fútbol a ningún país que esté en guerra con otro Estado”, afirmó Karl-Georg Wellmann, experto en política exteriores de la Unión Cristianodemócrata (CDU) de la canciller Angela Merkel.

“Naturalmente Alemania sería, como campeona del mundo, la alternativa adecuada para celebrar el Mundial. Lo mejor sería hacerlo en cooperación con Polonia y Ucrania, que también tienen estadios de fútbol modernos”, agregó.