Sporting Cristal, al igual que muchos otros clubes peruanos, no se ha caracterizado por realizar muy buenas contrataciones extranjeras.

Son pocos jugadores que llegaron a la tienda celeste desde el extranjero y se convirtieron en figuras: Pedro Garay, Julio César Balerio, Julinho están entre los foráneos más destacados, pero fueron muchos más los que no brillaron con la camiseta bajopontina, tanto así, que pocos recuerdan sus nombres.

Aquí una pequeña lista:

Gerson Lente jugó en Ciclista Lima y en Alianza Lima antes de llegar al Rímac en el 96, donde, a pesar de formar parte del equipo tricampeón, nunca destacó.

El ghanés Annor Aziz llegó en 1998, en el mejor momento de su compatriota Prince Amoako, quien participó del subcampeonato en la Copa Libertadores.

Robert Lima llegó en el 2004 y a pesar de su garra y experiencia, su lentitud lo dejó en evidencia muchas veces.

El japonés Takashi Watari llegó a Sporting Cristal como parte de un convenio con una empresa japonesa en el año 2005. Nunca jugó.

El ecuatoriano Gustavo Figueroa llegó también en el 2005 y era un delantero que brillaba en su país, más no en el Perú.

El volante Carlos Marczuk llegó proveniente de Bolognesi en el 2006. A pesar del ímpetu nunca se adecuó al equipo celeste.

Ramiro Fassi, defensor argentino, llegó en el 2007 y jugó varios partidos de titular en el año donde el equipo celeste peleó la baja.

El mismo año llegó el delantero brasilero Cristiano Da Silva, que se destacaba por jugar con guantes, pero no por su juego.

Marcelo Martusciello, volante uruguayo, llegó también en el 2007 y tuvo un opaco rendimiento cuando jugó.

Los defensores Breyner Bonilla y Ricardo Martínez, colombiano y paraguayo,respectivamente, formaron, en el 2010, una de las duplas más inseguras de los últimos años. Muchas ganas, pero bajo rendimiento.

El paraguayo Carlos Espínola y el argentino Luis Escalada, ambos nacionalizados ecuatorianos llegaron en el 2011 cuando Juan Carlos Oblitas estaba en el club.

En el 2013 llegó Jonathan Ramírez, conocido como el ‘Rayo’ no tuvo muchas oportunidades.

Este año, el argentino Leandro Leguizamón tuvo mala suerte y tuvo que marcharse rápidamente ante la falta de goles.