La selección de Uruguay aterrizó en el aeropuerto de Carrasco, en Montevideo, con la mente puesta en las eliminatorias clasificatorias para el Mundial 2018, siguiente compromiso oficial a afrontar, una vez quedó eliminada de la Copa América de Chile tras perder contra el anfitrión (1-0).

Recibidos por varios centenares de personas que acudieron para hacerse fotos con ellos e insuflarles ánimo, los jugadores manifestaron su pesar por la actuación arbitral del partido ante Chile y la intención de pasar página para afrontar a partir de octubre la fase de clasificación para el Mundial 2018.

“Esto es una pausa en nuestro camino, queda mucho por vivir y en unos meses estaremos juntos de nuevo para empezar las eliminatorias para el Mundial, que es realmente lo importante y lo que todos soñamos”, declaró a su llegada el capitán de la selección, Diego Godín.

El zaguero del Atlético de Madrid se mostró orgulloso de sus compañeros y de cómo defendieron la camiseta.

“Ahora hay que seguir adelante con la cabeza bien alta”, indicó, sin esconder que las decisiones de ayer del colegiado influyeron en el resultado del partido.