erró para el primer penal de la final en la definición del título de la que Chile ganó por 2 a 4, tras el empate sin goles en los 120 minutos disputado en el MetLife Stadium de New Jersey.

De inmediato se agarró la cabeza y mientras sus compañeros lanzaban, no quiso ni ver los otros disparos y cuando no hubo nada que hacer, terminó en llanto.

Fue abrazado por sus compañeros, se fue al banquillo con su mirada perdida, pero sigue sumido en una tristeza infinita al perder de nuevo un campeonato con Argentina por tercera vez consecutiva.

La tristeza de Lionel Messi no parece tener fin. Tras el partido, en zona mixta, anunció que renunciaba a su selección.