¿Qué haces para descansar plácidamente? Seguro que tu respuesta es un baño caliente antes de acostarte, pero hay otros aspectos externos que te ayudarán a conciliar el sueño. Según los investigadores de todo el mundo han encontrado cómo ciertos detalles cómo los colores vibrantes de una pared, la suciedad y exceso de luz en la habitación puede afectarte.

1.- Una habitación ordenada es la clave

El primer paso para tener una noche tranquila es tener el espacio ordenado. De acuerdo al psicólogo Sherrie Carter, en un artículo publicado en “Psychology Today”, el desorden conduce al estrés. “Se necesita nuestra atención de donde debería estar y hace que sea difícil relajarse física y mentalmente”.

2.- Elegir el color

El tono de tu habitación es muy importante para dormir más horas. Una encuesta realizada por la empresa Travelodge indicó que las personas que ponen por ejemplo los tonos púrpuras en el cuarto dormían solo 5 horas por la noche, en comparación con más de 7 horas de las habitaciones azules. Según el análisis, esto se debe a que el púrpura se percibe como un color que estimula la creatividad y el inconsciente.

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3.- Dosis de cantidad de luz

Una habitación iluminada puede ser perfecta para el día, pero al acostarte, lo ideal es que el ambiente se mantenga oscuro. Según un estudio publicado en la revista de la Sociedad de Endocrinología, la exposición a la luz, sobre todo la artificial, antes de acostarte tiene un impacto en el sueño, en la presión arterial y en el nivel de glucosa, ya que inhibe la producción de melatonina, hormona asociada con el sueño.

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