A través del análisis de la escritura, se puede revelar la personalidad, el carácter, las emociones y las conductas de las personas. La letra y la firma son el reflejo inconsciente del potencial, ambiciones, cualidades, debilidades que hacen de cada ser humano una persona especial.

La función electroquímica del cerebro, es la que dirige los músculos que mueven la mano durante la escritura, al tiempo que interactúa con la memoria y los sentidos, de esta forma se procesa la información que se recibe.

La grafología fundamenta su estudio en los trazos escritos en el papel gracias a la relación cerebro-psicomotricidad. Esta sincronía es la que revela los rasgos de personalidad más profundos de las personas.

La escritura es como la huella digital, única e irrepetible. Asimismo el grafismo es personal y evoluciona junto con el autor, revela cada una de las etapas de la vida y el crecimiento interior.

Fuente: Salud 180