Los humanos asociamos los nombres de pila a distintos niveles de éxito, suerte y atractivo. A esa conclusión llegó el psicólogo Richard Wiseman, que asegura que esas percepciones pueden tener consecuencias importantes en la vida real.

En un estudio con más de 6000 personas, Wiseman comprobó que para los británicos llamarse Elizabeth o James está asociado al éxito. Lucy y Jack son los nombres de los más afortunados, mientras que se asocia que las personas con peor suerte se llaman Helen o John. Ann y George se perciben como nombres de personas poco atractivas. Y Sophie y Bryan son los más seductores.

Además, tu nombre puede influir en tu éxito o fracaso académico. Investigadores estudiaron cómo influía el nombre en las expectativas de profesores y otros adultos sobre los resultados de un estudiante en una escala de 1 (“no muy exitoso”) a 10 (“muy exitoso”).

Los nombres asociados a peores resultados fueron Brandon, Justin, Travis y Cody. Por el contrario, Robert, Andrew, Samuel, Katherine y Alexandra eran asociados a alumnos con mejores resultados académicos. Curiosamente estos últimos nombres también se vinculan con un mayor estatus socioeconómico. Además, los investigadores han comprobado que las niñas llamadas Katherine suelen ir a escuelas privadas, y los llamados Lauren a universidades públicas.

Fuente: Muyinteresante.es