¿Eres de las personas que en situaciones de nerviosismo come demasiado? La culpa es del cortisol, una hormona que el cuerpo genera en momentos de estrés y como efecto tiene el aumento de apetito. Según la experta de la plataforma online Yo elijo cuidarme, indica 4 tips para acabar con esta situación:

1.- Toma infusiones

Es importante que reducir el café, ya que lo único que hacen es agravar aumentar el problema de ansiedad. Por el contrario, tomar infusiones sin cafeína te ayudarán a relajarte y contribuirte en la relajación muscular.

2.- Sírvete en el plato

Tienes que tomar consciencia de lo que comes, por ello, es necesario coger un plato y servirte aquello vas a comer. Este truco funciona, ya que visualizáremos todo lo que se va ingerir y tendrás el control. Por ejemplo, en momentos de debilidad toma una pieza de fruta, córtala en trocitos y ponlas en el plato.

3.- Planifica tus comidas

No es una gran idea dejar en manos de la improvisación lo que vas a comer. Por ello, una buena planificación evitará el descontrol en tu alimentación. Incluye en tu menú semanal cereales integrales, pescado, pescado, verdura.

4.- Comer despacio

Comer no significa cumplir con la necesidad de alimentarse. Todo lo contrario, debe ser un momento de disfrute, es sobre todo una pausa entre las obligaciones. Necesitas comer despacio, masticando lentamente y saboreando los alimentos.