El 80 por ciento de los fumadores que renuncian al tabaco ganan en promedio siete kilos de peso, situación que está exclusivamente relacionada con la modificación de la flora intestinal, según han descubierto investigadores del Hospital Universitario de Zúrich.

Esa ganancia de peso corporal no se debe, por tanto, a un aumento del consumo de calorías para compensar la abstinencia del tabaco.

El peso del exfumador aumenta si ingiere la misma cantidad o incluso menos calorías, reveló este lunes mediante un comunicado el Fondo Nacional de Investigación Científica de Suiza, que apoyó el estudio.

El fenómeno está directamente vinculado a los cambios en la composición de la diversidad bacteriana en los intestinos.

La experiencia científica se desarrolló durante nueve semanas con veinte personas: cinco fumadores, otros cinco que no fumaban y diez que habían empezado una cura de tabaco una semana antes de iniciarse la observación clínica.

Los médicos constataron que al dejar de consumir tabaco se habían producido importantes cambios en la composición de la flora intestinal microbiana.

Este mismo resultado había sido observado anteriormente en experimentos con ratones.

Fuente: EFE