Un caso de reversión de diabetes tipo 2 en un paciente con la enfermedad en Gran Bretaña ha vuelto a dar impulso a la idea que una dieta restringida en calorías, realizada en un período determinado de tiempo, puede tener efectos beneficiosos en el tratamiento de la enfermedad, la que hasta el año pasado afectaba a 371 millones de personas en todo el mundo.

El caso, según publica BBC Brasil, se dio en el periodista británico Richard Doughty (59), siguió una dieta de sólo 800 calorías por día en un duro régimen de tres comidas diarias de 200 calorías cada una, más una porción de frutas y vegetales de otras 200.

Además, tomó tres litros de agua por día.

El régimen de Doughty duró 11 días y, según él mismo contó, no fue nada fácil de realizar.

“A menudo me sentía muy cansado… Una noche, después de ir al teatro, casi no pude subir las escaleras de la estación de tren local, y caminar de vuelta a casa me parecía imposible. Sentí mucho frío, y llegué a usar cuatro capas de ropa en pleno verano y con mis dedos entumecidos”, dijo Doughty.

Doughty investigó en Internet sobre la diabetes tipo 2 y contactó al investigador Roy Taylor, de la Universidad de Newcastle, autor de la teoría de la dieta de 800 calorías, además de contar con el apoyo de su propio médico, quien lo autorizó a iniciar un régimen de reducción de calorías diarias.

El periodista había intentado antes una dieta menos radical, de cerca de 1.500 calorías diarias, y con las que adelgazó, pero no logró bajar el nivel de glucosa en su sangre.

El investigador que desarrolló la dieta

La diabetes tipo 2 se desarrolla cuando el páncreas deja de producir suficiente insulina para mantener la glucosa en la sangre en niveles normales. En el caso de la diabetes tipo 1, también llamada diabetes congénita, el páncreas deja de producir insulina por completo, por lo que el paciente necesita inyectársela.

En ambos casos, sin control adecuado, el nivel de glucosa en la sangre alcanza un nivel de riesgo, lo que a largo plazo puede causar complicaciones en los riñones, presión arterial, pérdida parcial o total de la visión y problemas del corazón, entre otros males.

La diabetes tipo 2 está fuertemente asociada a la obesidad, una condición de salud que se está extendiendo en todo el mundo.

El profesor Roy Taylor observó que los pacientes que se habían sometido a cirugía para reducir el estómago pasaban luego por un período de drástica reducción de ingesta de calorías.

“Hasta acostumbrarse a la reducción del estómago, los pacientes comen muy poco porque se llenan muy rápido y sienten náuseas. Con esto se pierde mucho peso en poco tiempo”, dijo Taylor a BBC Brasil.

Fuente: 24horas.cl