Investigadores de todas partes del mundo trabajan intensamente aprovechando los beneficios de la tecnología para poder conseguir impresiones perfectas de órganos en 3D.

Una de las empresas involucradas en este proyecto es Organovo, ubicada en San Diego, California (Estados Unidos), bajo la dirección de Keith Murphy, según una nota de Euronews.

“Imprime material gracias a dos cabezas. Por un lado tenemos las células y por el otro el gel. Tenemos una precisión de 20 micrómetros. Puedes imprimir células que se juntan en tres dimensiones para crear un trozo de tejido”, explicó Murphy.

En Organovo, hay más de treinta ingenieros y biólogos trabajando. Aseguran que ya se pueden imprimir fragmentos de músculos cardíacos, de pulmones y de vasos sanguíneos, pero que aún están lejos de reproducir un corazón o un hígado.

La tinta biológica está hecha con células madre extraídas de tejido adiposo o de médula ósea. En tubos de ensayo, se procede a su cultivo, ya que se necesitan millones para crear un milímetro de tejido.

Las células se ubican capa por capa y una computadora brinda la forma del órgano. Luego es la naturaleza la que se ocupa de organizarlas para formar un tejido vivo.

“Si no tienes la capacidad de crear vasos sanguíneos, estás limitado. De momento, sólo podemos trabajar sobre superficies milimétricas, pero el día que podamos imprimir una red sanguínea sobre una superficie más amplia, podremos trabajar tejidos más grandes”, aseguró Murphy.

La principal ventaja de esta nueva técnica es que los riesgos de rechazo serían nulos, ya que las células provendrían del propio paciente.

Fuente: Infobae.com