Enfrentar desgracias personales, como accidentes o la muerte de un familiar cercano, suele generar reacciones depresivas y cuadros de estrés, los cuales pueden acelerar el brote o empeorar el estado del cáncer, advirtió el psicólogo Samuel Gonzáles-Puell, especialista y médico del Instituto de Tumores de Bordet, en Bélgica.

Sostuvo que la depresión y la ansiedad producidas por esos sucesos desafortunados pueden estimular que las lesiones precancerosas evolucionen rápidamente hasta convertirse en cáncer, si es que los problemas de salud mental no son tratados por un psicólogo.

“Un evento de esa naturaleza puede aumentar, potenciar y acelerar el avance de una enfermedad que ya existe, pero que no ha sido detectada en el paciente por encontrarse en un estado muy inicial”, comentó el especialista.

En declaraciones a la agencia Andina, Gonzáles-Puell señaló que quienes enfrentan situaciones adversas deben contar con apoyo psicológico para prevenir los males derivados de las alteraciones metabólicas generadas por la depresión.

Si bien dichos problemas mentales pueden acelerar el avance de algunas enfermedades como el cáncer, el psicólogo aclaró que no existen estudios científicos que permitan afirmar que los estos originen los males oncológicos.

Refirió que, si bien hay pacientes que afirman haber presentado cáncer tras enfrentar una situación traumática, comprobar científicamente esas versiones es complicado porque demandaría la experimentación en casos reales.

Fuente: Andina