Un estudio realizado con imágenes por resonancia magnética (IRM) confirmó que la lactancia materna mejora el desarrollo cerebral de los bebés, según una publicación de la revista Neuroimage.

La investigación encontró que a los 2 años, los niños que habían sido amamantados en forma exclusiva durante al menos tres meses tenían un mayor desarrollo en zonas clave del cerebro en comparación con los niños que fueron alimentados con leche de fórmula.

Este es el primer estudio que demuestra con imágenes tomadas en tiempo real los efectos beneficiosos de la leche materna.

“Queríamos ver cuándo se producen en realidad estos cambios en el desarrollo del cerebro y hemos podido demostrar que están allí presentes casi desde el principio”, explica Sean Deoni, autor principal del estudio realizado en la Universidad de Brown, en Estados Unidos.