Todos sabemos que cuando nos alimentamos correctamente nuestro organismo recibe los necesarios para mantenerse en un óptimo estado de , además que recibe la energía suficiente para poder realizar las actividades del día a día.

Sin embargo, cuando obviamos algunos básicos como el desayuno, ya sea por la falta de tiempo o por cuestiones de dieta, nuestro organismo empieza a sufrir graves cambios, uno de ellos es el .

¿Por qué? De acuerdo con el (CNP) al obviar algunos alimentos, el cuerpo entra en ‘modo ayuno’ y emite una señal que no ha recibido ningún alimento, por lo que empieza a preservar el tejido graso, generando un aumento continuo de peso.

Además, estas malas prácticas alimenticias hacen que se disminuya la tasa metabólica del cuerpo, haciendo que se destruya el músculo. Asimismo, el metabolismo empieza a trabajar cada vez más lento, por lo que cuando se requiera quemar grasas, este tendrá muchas más dificultades para hacerlo.

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