No está mal querer siempre lo mejor, pero cuando ya empezamos a buscar el perfeccionismo, esto si puede balancearse a algo negativo. ¿Por qué? Porque habrá ocasiones donde no se podrá ser perfeccionista y esto solo te llevará a la frustración, pena ansiedad, emociones nada saludables para nosotros.

Por eso es necesario tener cuidado cuando buscamos que las cosas que queremos sean las mejores para evitar estas desventajas:

Depresión: Es inevitable que al buscar el perfeccionismo provoquemos un terrible estrés emocional. Esto hace que después de tanto esfuerzo y al final no quedar conforme con lo que hacemos, caigamos en depresión.

Rendimiento: La ansiedad se apodera de nosotros cada vez que buscamos el perfeccionismo. Esto, aunque algunos lo crean, afecta nuestro rendimiento haciendo que disminuya.

Trabajo: Si hablamos de trabajo y perfeccionismo lo único que lograremos es tener una adicción al trabajo y desarrollaremos la compulsión. Recuerda que esto puede desencadenar problemas de salud.

Trastornos alimenticios: Por andar concentrado en lograr la perfección puede hacer que descuidemos nuestra alimentación. Después de una dura jornada de varias horas, comer excesivamente no es nada recomendable.

Ten en cuenta estos puntos y comienza a cuidar tu salud mental y física.

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