“La colección está enmarcada en una visita a un país de dulces, de ensueño, y la inspiró el hecho de que siempre me han gustado los dulces”, dijo a Efe.

“Un día abrí el refrigerador de mi casa y tenía muchos dulces y se veía hermoso, con todos los colores”, indicó el modisto, que prácticamente transformó el lugar de la presentación en una atractiva confitería.

D’Angelo llevó a la pasarela pantalones largos y cortos para el hombre, chaquetas y por primera vez camisetas y propuso vestir a la mujer con sensuales vestidos cortos que puede llevar al trabajo y luego asistir a un cóctel, sin olvidar los conjuntos de pantalones, con piezas que puede intercambiar. EFE