Estas dos casas de moda fueron protagonistas de la tercera jornada de desfiles en la pasarela lombarda.

Emporio Armani suelta lastre en esta colección y se arriesga a la innovación en unas propuestas que rayan lo futurista y en las que se puede ver la influencia de las prendas de esquí, en general un aspecto muy deportivo.

Con estas propuestas Emporio Armani parece buscar más que nunca la comodidad y la cercanía con un hombre urbano, que pisa la calle y sufre los rigores del frío, sin olvidar algún guiño a esa moda juvenil de mostrar por encima del pantalón la goma de la ropa interior.

Por su parte, Gucci presentó una colección mucho más formal, más elegante y quizá menos arriesgada, con prendas clásicas como los jerséis de lana y punto o los abrigos largos de paño que aportan una nota de colores vivos sobre unos pantalones en tonos más apagados.

La firma italiana no se olvida de los blazers ni de los trajes de chaquetas, que siguen combinándose con camisa y pajarita y en los que se ha visto también algún cuadro príncipe de Gales, para hombres que usan grandes bolsos como complemento. EFE