Molly es una cocker spaniel que fue abandonada por su familia y estuvo por varios hogares temporales, hasta que el año pasado fue adoptado por Colin Butcher, quien tiene un trabajo extraordinario. Él se encarga de rescatar animales que se hayan perdido o que también hayan sido robados de sus casas.
Es así que Molly también se suma a esta tarea, y es la encargada de rescatar gatos que se hayan perdido, una responsabilidad que cumple con mucha dedicación y amor.
Colin lleva 20 años trabajando como detective en su agencia privada; sin embargo, nunca tuvo el éxito rescatando felinos, puesto que estos animales cuando escapan de hogares, quedan atrapados en lugares de los que no pueden salir. Y fue cuando Molly llegó, quién demostró que puede realizar esta tarea de manera eficaz.
Desde ese entonces, Molly rescató a once gatos. Su primera búsqueda exitosa fue en febrero, los dueños del gato no podrían creerlo, ya que el felino se encontraba en el techo de un granero.