A veces el amor que tenemos hacia nuestro perro o gato nos vuelve en personas muy sobreprotectoras, pero como padre sobreprotector nunca nos damos cuenta. Sin embargo, hay 22 señales que indican que sí lo eres. El sitio web Buzzfeed hizo una interesante lista de 22 señales que revelan que eres sobreprotector con tu mascota. ¡Descubre si eres uno!

1. No importa qué tan bien cerrada esté tu casa, tú imaginarás algún escenario en el que tu mascota se escapa.

2. Sin mencionar las innumerables otras cosas que podrían salir mal cuando los dejas solos.

3. Definitivamente tuviste que reforzar tus muebles con elegantes cobertores.

4. Claramente, salir de vacaciones no es siquiera una opción a menos que puedas llevar a tu mascota contigo.

5. Pero si es ROTUNDAMENTE necesario que dejes a tu mascota en casa, la dejas con tu amigo de mayor confianza.

6. Te aseguras de controlar los ingredientes de cada nueva comida que compras.

7. Eso incluye los antojos que les encantan tanto.

8. Y sabes con exactitud el peso de tu mascota.

9. Te sabes de memoria el tipo de comida para humanos que nunca debes darle a

tu mascota.

10. Y si tienes plantas, has buscado las que son aptas para tu mascota.

11. Tienes el teléfono del veterinario de emergencias más cercano en marcación

rápida.

12. Y AL MENOS una vez has ido a la clínica de tu veterinario habitual por el

más minúsculo rasguño.

13. Como resultado de esto, tú y tu veterinario se llaman por su nombre de pila.

14. Hay más juguetes de animales tirados por toda tu casa que, digamos, cualquier otra cosa.

15. Probablemente tienes un cepillo de dientes… para tu mascota.

16. Y, literalmente, también tienes una biblioteca de libros y manuales sobre el cuidado de mascotas.

17. Si tu mascota duerme por la noche en cualquier lugar que no sea junto a ti, te preocupas de que algo ande mal.

18.- …Incluso si están durmiendo en esa costosa cama nueva que les compraste solo para ellos.

19. Gastas más dinero en el aseo de tu mascota que lo que gastas en ti mismo.

20. En caso contrario, has aprendido a asearlos tú mismo, desde el cuidado del pelo hasta el corte de las uñas.

21. Te sientas en el trabajo pensando solamente en lo mucho que tu mascota debe estar extrañándote ahora mismo.

22. Y, por supuesto, lo mucho que tú los extrañas a ellos.