Hasta el martes 17 de enero, se realizará el en la emblemática Alameda Chabuca Granda, en el centro histórico de la capital, donde se espera la concurrencia de más de 35,000 personas, estimó la Municipalidad de Lima.

Precisó que este festival forma parte de una serie de actividades que la comuna edil viene organizando con ocasión de celebrarse el 482 aniversario de la fundación de Lima, cuyo día central es el 18 de enero.

Es así que miles de personas procedentes de prácticamente todos los distritos de la capital se dan cita en la emblemática alameda desde las 11 de la mañana hasta las 10 de la noche.

Ayer domingo, acudieron cientos de jóvenes y adultos que en un ambiente de fiesta y confraternidad también aprovecharon la ocasión para consumir deliciosas butifarras mientras disfrutaban de presentaciones artísticas en vivo.

El es uno de cócteles peruano clásicos que en los últimos 8 años ha vuelto a recuperar el protagonismo que tenía a sus inicios.

Chilcano y butifarra en la historia

Existen muchas versiones sobre sus orígenes. Se dice, por ejemplo, que en el siglo XIX en el Puerto del Callao había un barrio italiano famoso por sus pulperías, y donde se preparaba un caldo concentrado al cual lo llamaban chilcano, que tenía propiedades reconstituyentes, con sabor y aroma de kion marcado y de color turbio al que se agregaba limón.

Posiblemente de este caldo derive o preste su nombre el chilcano, al tener casi las mismas propiedades en color y aroma obtenido por el ginger ale (bebida a base de kion).

Entretanto, la butifarra es un reconocido sánguche que se presenta en pan francés, lleva jamón del país, cebolla y ají. Se remonta a finales del siglo XVIII como una fusión de sabores de origen italiano, con ingredientes españoles y con una preparación y sabor peruano, convirtiéndose en el perfecto elemento que marida con el chilcano.

Fuente: Andina