Arqueólogo e historiador Luis Guillermo Lumbreras manifestó que la construcción de la Ciudadela Inca no demoró más de 10 años y es un lugar planificado.

“Es algo equivalente a lo que es un monasterio cercado donde viven los monjes con todos sus servicios. Es un lugar planificado, en donde se sabía antes de construir donde iba a estar el templo”, indicó en Radio Capital.

“Su construcción no debe haber llegado a 10 años, no más, porque es un lugar bellísimo e impresionante. Me imagino a Pachacútec escogiendo un lugar donde iba a vivir eternamente, donde iba a colocar su momia e iba a vivir para siempre”, acotó.