Al cumplirse esta semana los 450 años del nacimiento de Shakespeare, sus tragedias, comedias, sonetos y obras históricas siguen fascinando a los lectores, y sus obras más célebres, como “Hamlet” o “Romeo y Julieta”, figuran entre las más representadas en el teatro.

Su universo literario ha sido tan importante que muchas de sus frases son claramente identificables y otras se han incorporado al lenguaje diario, como “ser o no ser” o “mucho ruido y pocas nueces”.

Shakespeare, cuya fecha exacta de nacimiento es un misterio, aunque se sabe con certeza que fue bautizado el 26 de abril de 1564, es un icono cultural del Reino Unido, donde cada año por estas fechas es recordado con distintos eventos en su ciudad natal, Stratford-upon-Avon (centro de Inglaterra).

William Shakespeare es para el mundo anglosajón lo que Miguel de Cervantes Saavedra (1547-1616) es para la literatura española.

Como dijo en su día el también dramaturgo inglés Ben Jonson (1572-1637), Shakespeare “no pertenece a una sola época sino a la eternidad”, pues su obras han trascendido las fronteras nacionales y han resistido el paso del tiempo.

Según una encuesta internacional publicada esta semana con motivo de los 450 años de su nacimiento, Shakespeare fue votado como la figura cultural más representativa del Reino Unido.

De acuerdo con el sondeo, divulgado por el British Council, el organismo responsable de fomentar la cultura británica en el extranjero, 5.000 adultos en países como la India, Brasil, Alemania, China y EE.UU. lo eligieron como icono británico. EFE