Plácido Domingo estrenará el sábado en Los Ángeles la ópera “Thaïs” con la que se cierra la temporada de lírica en la urbe californiana, desde donde el veterano intérprete observa con preocupación la situación que vive su sector en Estados Unidos.

El renombrado tenor de 73 años señaló que “es triste” ver cómo teatros vecinos pasan por problemas, en referencia a la amenaza de cierre que persigue a la Ópera de San Diego por dificultades financieras y la posible huelga que podría paralizar el Metropolitan de Nueva York.

“La ópera vive por más de 400 años, es importante que todo continúe”, comentó Domingo que recordó que en 2008 ya tuvo que bajar el telón la Ópera Pacific del sur de California por falta de fondos.

En Nueva York, la falta de acuerdo entre los gestores del Metropolitan y los músicos en torno a los términos de renovación del convenio laboral que expira el 31 de julio ha llevado a los trabajadores a permitir que sus representantes sindicales convoquen una huelga si lo consideran necesario.

“Sería una pena por tanta gente que puede perder trabajos, tanta gente que estaría parada por mucho tiempo y el público sería también el que lo pagará”, afirmó el artista, quien es a su vez el director general de la Ópera de Los Ángeles.

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