Un espectáculo de luz y música ideado por el colectivo artístico phase7 y bautizado Burning Snow (nieve ardiente) puso fuego de forma simbólica a la ciudad sobre las heladas aguas del río Ume en la ceremonia de inauguración, a la que asistieron la princesa heredera Victoria y su esposo, el príncipe Daniel.

Varios artistas internacionales transformaron a su vez el centro de la ciudad en un museo al aire libre con obras basadas en su relación con la nieve y el hielo.

Y la plaza del Ayuntamiento se convirtió en una recreación de una aldea del pueblo indígena sami, que habita el norte de Escandinavia y parte de Rusia.

Con cerca de 120.000 habitantes en su municipio, Umeå es considerada la ciudad más importante del norte de Suecia y de la región de la Laponia sueca.

De ahí que el programa de actos para la capitalidad cultural haya sido dividido en ocho estaciones, de acuerdo con la cultura sami, e incluye cientos de actividades culturales, desde festivales de música a exposiciones.

Mons (Bélgica) y Pilsen (República Checa) tomarán el testigo como capitales europeas de la Cultura en 2015, y al año siguiente lo harán San Sebastián (España) y Breslavia (Polonia). EFE

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