¿Comida de plástico con saborizantes? ¿Recuerdas a las impresionas 3D? En la actualidad muchas personas ya han empezado a producir sus propios objetos gracias a la impresora 3D. Esta máquina no solo te permite fabricar tus instrumentos, sino que ahora da un paso más: la comida.

Alex Vidal, profesor de los Estudios de Ciencias de la Salud de la Universitat Oberta de Catalunya (España), explica que en un futuro el sector industrial no solo podrá fabricar herramientas, sino también productos alimenticios.

En un video de YouTube se muestra cómo estas impresonas 3D han entrado en las cocinas de grandes restaurantes y servicios de comida, pero en un futuro próximo aspiran a convertirse en un electrodoméstico más con fines gastronómicos.

Uno de ellos es el Chefjet y la Chefjet Pro para estimular la innovación gastronómica; la canadiense ORD Solutions, que ha impulsado la RoVaPaste Hybrid Food 3D Printer; o la también estadounidense Systems and Materials Research, que prepara un modelo que pueda nutrir de manera sana a los astronautas.

Para imprimir una pizza o un pastel, hay que proveer la máquina de la materia prima, programarla y esperar a que prepare el plato, un proceso que puede tardar desde sólo cinco minutos hasta veinte o treinta, dependiendo de la receta y la dificultad.

¿Te comerías el producto final? Algunos les podrá parecer gracioso, pero puede ser de gran ayuda no solo para la vida de los astronautas, sino también para la excases de alimentos en algunos países del mundo.

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