El problema viene de una publicación en la red de la lista de alumnos de un colegio primario, en el cual aparecen nombres reales como Pikachu, Kitty e incluso Tetris.

El impulso de burlarse de los nombres en la red no se ha hecho esperar. Es por ello, que el primer ministro a hecho una llamado de atención a los padres de familia que se han dejado llevar por su pasión a los diferentes personajes animados.