La popular marca de gaseosas decidió crear una campaña de publicidad distinta, que combinara los formatos tradicionales con los medios sociales, donde integrara Twitter dentro de sus comerciales de televisión.

Tras un estudio que señalaba que el 60% de los rumanos comían solos, acompañados solamente de la TV o sus smartphones, Coca Cola decidió hacer algo para que la población de Rumanía pueda redescubrir la alegría de compartir una comida juntos.

En la pauta, que fue muy popular en el país europeo, los avisos de publicidad eran acompañados por los tweets que generaban los usuarios bajo el hashtag #LetsEatTogether.

Como resultado, los usuarios de Twitter en Rumanía se incrementaron en 15% y el anuncio obtuvo más de un millón de impresiones en medios sociales.