A poco tiempo de que inicien las ventas del esperado Samsung Galaxy S5 completamente a nivel nacional, tenemos muchas especulaciones sobre comprar o no este nuevo móvil, sobre todo para aquellos que ya cuentan con un Galaxy S4 y se preguntan si en realidad deben cambiarlo o no. Por ello, te brindamos un video con las principales diferencias y te mencionamos algunas a continuación.

Diseño y pantalla: El acabado del S5 continúa siendo de plástico, y con el mismo diseño. Aunque simula la piel en la parte trasera de la carcasa para mayor elegancia. El S5 pesa 15 gramos más y cuenta con una pantalla Super AMOLED de 5,1 pulgadas (0,1 pulgadas más que el S4).

Cámara, sensor de huellas y pulsómetro: Aquí es donde residen las mayores diferencias. El S5 ha incorporado un sensor de 16 MP (3Mp más que el S4) y tiene autoenfoque de 0,3 segundos. Otra mejora es su sistema

Selective Focus que permite reenfocar una imagen ya habiendo tomado la foto para jugar con la profundidad y modo HDR para ver cómo quedaría la foto antes de tomarla.

El S5 también incluye sensor de huellas dactilares. Incorpora también otro sensor justo debajo de la cámara y al lado del flash LED, capaz de leer pulsaciones para una aplicación relacionada con la salud, un plus con el que no cuenta el S4.

Batería y conectividad: La batería del S5 supera un poco a la del S4, ya que cuenta con capacidad de 2.800 mAh y promete 390 horas en reposo, 10 horas en navegación web y hasta 21 horas de conversación; y cuenta con modalidad de “ahorro de energía”. Además, el S5 se diferencia por tener mayor resistencia al agua y al polvo y ha incorporado una tapa para el puerto micro USB 3.0.

Fuente: cnet.com